1.- ¿Qué significa legitimar?
Legitimar consiste en “convertir algo en legítimo”.
De forma más concreta supondría dar validez a cómo se sienten y viven las cosas los demás. Cuando hablamos de legitimar sentimientos nos referimos a aceptar una esencia muy propia e intangible (las emociones) bien sea en referencia a la pareja, a los hijos, a las amistades o en relación a los empleados.
2.- ¿Cómo podemos hacerlo?
Con una escucha activa; es decir escuchando sin interferencias, sin que nuestras propias convicciones interfieran, empatizando con las personas. Se trata de: sentir lo que sienten los demás, viéndonos a nosotros mismos y al mundo desde su punto de vista.
3.- ¿Por qué es importante empatizar y legitimar?
Los beneficios que tiene la empatía son muchos y variados. Entre los principales se encuentran: ayuda a sentirte mejor contigo mismo, ayuda en la resolución de problemas, desarrolla las habilidades sociales, ayuda a tener respeto por el resto de personas, ayuda a conectar mejor con los demás, incrementa la autoestima, induce a ser justos, fomenta el no juzgar a otros, por lo que contribuye a la inteligencia emocional….
4.- En el caso de los hijos, un ejemplo de los beneficios sería:
Cuando unos padres legitiman los sentimientos de su hijo lo que consiguen es que este pueda compartir de forma habitual con ellos sus conflictos internos, sus discrepancias con los demás y su forma de entender el mundo. El hijo se siente respaldado por ellos, puede integrar en su visión los comentarios de los padres. Su autoestima se fortalece. Aprende a gestionar sus sentimientos, ya que los comparte y expresa. Además, como no le juzgan obtiene un aprendizaje adicional consistente en no juzgar ni criticar a los demás.
Un niño que ha tenido un aprendizaje emocional tiene muchas posibilidades de convertirse en un adulto con importantes habilidades sociales y de inteligencia emocional.
Para concluir podemos decir que: Legitimar las vivencias de los demás, aunque no las compartamos, nos acerca, nos conecta y nos une con ellos.